Identificación

Código. 1401101	Carácter. Cementerio interior
Provincia. CÓRDOBA	Municipio. LOS BLÁZQUEZ

Descripción

Fecha. 1936	Titularidad. Pública
Localización/Descripción.
Cementerio ubicado a las afueras del municipio, rodeado de campo cultivable, en las inmediaciones se encuentra una Estación de Servicio En cuanto a la localización de la fosa común de la localidad de Los Blázquez, esta se ubica en el interior del cementerio de la localidad. Habría dos cementerios, el antiguo, que es anterior a la Guerra Civil y que quedó en desuso y el actual que se fundó antes de la Guerra Civil y que es donde estaría la fosa. Se sabe que está en el interior pero no el lugar exacto, se ha colocado una placa conmemorativa de las víctimas que se produjeron en el mes de noviembre de 1936 y en honor a los que perdieron su vida. En concreto hay inscritas en dicha placa el nombre de las 21 personas que murieron aquel fatídico día. Se piensa que por esa zona podría estar, lo que hoy será la calle que da a esa placa. Estaría situada la placa en el margen izquierdo del mismo. Se enterraban en cualquier parte del cementerio y que se colocaban unos palos con unas botellas boca abajo, para saber donde estaban enterrados, y que muchas mujeres iban a llevarles flores. Por otra parte, las 12 personas que aparecen inscritas en e Registro Civil, 1 en 1936, 1 en 1939, 6 fallecieron en 1942 y 4 en 1949. de estas sabemos por el registro que fueron enterradas en el cementerio de la localidad, pero no se sabe donde fueron enterradas exactamente, por eso hacemos referencia a lo que nos contó el encargado del cementerio.

Contexto histórico

Víctimas. 21

Fuentes. Relato histórico.

Los Blázquez fue de predominio socialista como el resto de la cuenta de Peñarroya. El Alcalde fue Miguel Cornejo. La Guardia Civil se concentró en Peñarroya y no se produjo ninguna víctima de derechas. En una ocasión entraron los milicianos de Peraleda (Badajoz) que detuvieron a un grupo de derechistas, pero el vecindario impidió que se le diera castigo alguno a los fugitivos que quedaron a salvo. Los primeros meses de guerra habían transcurrido con relativa normalidad y sin ninguna violencia contra las personas de derechas. Una vez el pueblo bajo control franquista, se puso en práctica una represión completamente arbitraria que provocó el fusilamiento el 3 de noviembre de 1936 en que hicieron fusilar a 16 hombres que estaban arando en el campo (una matanza de escarmiento). Se les llamó al cuartel y se les fusiló en dos tandas de 8, los días 12 y 15 de noviembre. El 12 de noviembre, fuerzas republicanas de Extremadura intentaron la recuperación de Los Blázquez, pero fracasaron la encontrarse con una pequeña columna desde Peñarroya, al mando del comandante Azofra. En abril de 1937 el pueblo de Los Blázquez será recuperado por las tropas republicanas. El 31 de marzo continuó la contraofensiva republicana, avanzando por las carreteras de Espiel y Peñarroya, llegando al puerto del Calatraveño y a cerros de Cabeza Mesada. El 31 quedó ocupada la zona minera de “El Soldado” (Villanueva del Duque) y se rebasó en ocho kilómetros en dirección a Peñarroya. En las carreteras de Espiel y Peñarroya seguían los ataques, el día 2 de abril se hallaban los bandos agotados. El 3 de abril la contraofensiva republicana tomó nuevos bríos y entró en su segunda fase poniendo en apuros los dominios franquistas en la cuenca de Peñarroya. El plan de acciones republicano consistía en la acción inmediata de Peñarroya ocupando el triángulo de Valsequillo – Los Blázquez – La Granjuela y de allí a Fuenteovejuna para así hacerse con Peñarroya posteriormente. El 5 de abril fue otra jornada triunfal tras la recuperación el día anterior de Valsequillo a cargo de las tropas republicanas. Los internacionales tomaron La Granjuela por la mañana y por la tarde Los Blázquez. Después de la batalla defensiva de Peñarroya, desde primeros de junio de 1938 se desarrolló el período final de la guerra en Córdoba, caracterizado por operaciones de mayor envergadura. La bolsa de Los Blázquez y Peraleda consistía en un entrante del frente republicano entre los que se hallaban los pueblos de Peraleda de Zaucejo (Badajoz), Los Blázquez, La Granjuela y Valsequillo en Córdoba. Y flanqueado por la posición franquista del macizo de Los Pollos (Badajoz) y sierra de Argallén, y en las tierras de Córdoba por Mano de Hierro al Norte de Peñarroya que se había ocupado el 29 de marzo del 38. Esta zona era una peligrosa avanzadilla hacia Peñarroya desde abril de 1937 cuando la contraofensiva de Pozoblanco. La idea de Queipo era en romper el frente por cerro Navarra, cerca de Los Blázquez, siendo los sitios más codiciados las Sierras Mesegara y Trapera, cerca de Hinojosa. En el lado opuesto, las fuerzas republicanas que sufrieron la embestida y la derrota fueron las tropas de la 91 Brigada (3ª División) al Oeste del Zújar y dos compañías de ametralladores del XX Cuerpo de Ejército. Al Este del Zújar, delante de Los Blázquez, se encontraba la 103 Brigada (38 División de Madroñero), una compañía de ametralladoras desde cerro Navarra hasta el río. Más al Este la 88 Brigada continuaba defendiendo Los Blázquez, La Granjuela, el ferrocarril de Almorchón, etc. Dos escuadrones de Caballería en Hinojosa y en Valsequillo, más unidades de carros y baterías. El cierre de la bolsa de Los Blázquez se acometió en la mañana del 14 de junio utilizando el factor sorpresa. Las tropas franquistas avanzaron con un frente que comprendía desde el Río Zújar hasta Sierra Grana rompiendo las filas republicanas defendidas por las Divisiones 37 y 67 y ocupar Los Blázquez y el macizo de cerros situados al Norte. El 15 de junio el objetivo era explotar el éxito. Se colocaron en una inmejorable muralla montañosa entre las sierras de Torozo, Mesegara y Trapera. El 16 de junio se desvió el ataque por el flanco derecho sobre los pueblos de La Granjuela y Valsequillo que fuero ocupados además de Sierra Noria y Sierra Patuda que enlazaba con Trapera, ocupada el día 15. El día 18 se acometieron las operaciones ya en tierras de Badajoz. Las tropas republicanas incapaces de rehacerse de la ruptura del frente, se vieron en una grave situación. Rápidamente llegó la 148 Brigada del Ejército de Andalucía y las 10 División desde Madrid, así como la 12 Brigada de Asalto., y contuvieron la victoria inicial de Queipo y los días 19 y 20 contraatacaron desde el Norte de Peñarroya y hasta el 24 de junio no se pudo tener un contraataque general por parte republicana. 1939: La última batalla de la República, en tierras de Córdoba. Desde el 5 de enero de 1939 hasta el 4 de febrero, se llevó a cabo la última gran batalla de la República eligiéndose como escenario al línea de frete comprendida entre Hinojosa y Villanueva del Duque y en dirección a Peñarroya, Fuenteovejuna, La Granja y Peraleda. En esta batalla intervinieron 72.000 hombres por parte franquista y 92.500 por parte republicana con un balance conjunto de 30.000 bajas y entre ellas unos 8.000 muertos. En absoluto fue una batalla simbólica en la que miles de muertos dejaron sembrados los campos cordobeses de Peñarroya a Valsequillo y Los Blázquez. El grueso de la operación se desarrolló en tierras de Córdoba. Algunos mandos republicanos venían proyectando una ofensiva hacia Badajoz con objeto de cortar la zona nacionalista. Largo Caballero había propugnado este plan, al igual que el general Vicente Rojo. Se llevaría al final de la guerra cuando toda oportunidad favorable se había perdido. Las fuerzas republicanas de la zona Centro – Sur en tregua desde fines del 38 se reorganizaron y los prepararon moralmente para la batalla. A comienzos de 1939 el Ejército de Extremadura seguía a cardo del general Antonio Escobar. El jefe supremo del Grupo de Ejércitos de la Región Centro era el general Miaja, siendo jefe de Estado Mayor el general Matallana. Las últimas semanas de 1938 comenzaron los movimientos y concentraciones de tropas republicanas en todo el frente meridional que enseguida captaron los servicios de información de Queipo de Llano. El plan del general Vicente Rojo (Plan P) era perfecto pero no se contó con la dificultad de las vías de comunicación y carreteras en la zona de Valsequillo y Peñarroya, así como el temporal de lluvias. A ello hay que unir el desinterés de los altos mandos republicanos deseosos de acabar la guerra como fura. Ya que Miaja suspendió a última hora el proyectado desembarco de Motril (Granada) por lo que se pospuso las operaciones. Finalmente el 5 de enero se inició la ruptura del frente por Valsequillo. Batalla muy sangrienta en la que miles de soldados republicanos dejaron su vida. A finales de año se fueron concentrando las tropas republicanas en la comarca de Los Pedroches frente a sólo dos divisiones franquistas la 22 y la 24. El 4 de enero de 1939 a las nueve de la noche se dio la orden de operaciones. Y a las ocho y cuarto del 5 de enero comenzando la preparación artillera. Las fuerzas gubernamentales alcanzaron las estribaciones de cerro Mariscal y Castillo de Los Blázquez, alrededores de Valsequillo. El 6 de enero la ofensiva republicana constituyó un nuevo avance que desmoronó la segunda línea de resistencia que habían tratado de fortalecer los franquistas. A partir del 24 de enero se considera la 4ª y última fase de la batalla de Valsequillo, caracterizada por el endurecimiento de la contraofensiva franquista y por el repliegue general republicano en todo el frente en dirección a las líneas de partida. Los franquistas presionaron decididamente en dirección a Los Blázquez considerando objetivo principal los cerros del Coscojo y del Cambrón. El día 25 de enero las tropas franquistas avanzaron hacia Valsequillo y venciendo la dura resistencia republicana, así como a Los Blázquez. El día 26 la 47 División republicana estableció su línea de defensa en la carretera de La Granjuela a Los Blázquez, extendiendo sus tres brigadas, la última de las cuales tomaba posiciones en el mismo cementerio de Los Blázquez. Pero estos fueron superados por la 74 División franquista.

Actuación

Fecha. Desconocida	Promotor. Ayuntamiento
Descripción de la actuación.
En cuanto a la localización de la fosa común de la localidad de Los Blázquez, esta se ubica en el interior del cementerio de la localidad. Habría dos cementerios, el antiguo, que es anterior a la Guerra Civil y que quedó en desuso y el actual que se fundó antes de la Guerra Civil y que es donde estaría la fosa. Se sabe que está en el interior pero no el lugar exacto, se ha colocado una placa conmemorativa de las víctimas que se produjeron en el mes de noviembre de 1936 y en honor a los que perdieron su vida. En concreto hay inscritas en dicha placa el nombre de las 21 personas que murieron aquel fatídico día. Se piensa que por esa zona podría estar, lo que hoy será la calle que da a esa placa. Estaría situada la placa en el margen izquierdo del mismo. Se enterraban en cualquier parte del cementerio y que se colocaban unos palos con unas botellas boca abajo, para saber donde estaban enterrados, y que muchas mujeres iban a llevarles flores. Por otra parte, las 12 personas que aparecen inscritas en e Registro Civil, 1 en 1936, 1 en 1939, 6 fallecieron en 1942 y 4 en 1949. de estas sabemos por el registro que fueron enterradas en el cementerio de la localidad, pero no se sabe donde fueron enterradas exactamente, por eso hacemos referencia a lo que nos contó el encargado del cementerio. Monumentalización de las 21 personas que fallecieron en el mes de noviembre. La fosa puede estar delante de la misma. Falta el resto de fallecidos.

Fotos

Municipio. Fotografía Aerea

Fosa. Fotografía a pie de Fosa