Juan Jesús González

Ayamonte
Huelva
Ramírez Copeiro del Villar, Jesús

Juan Jesús González «Cangrejata» nació en Ayamonte, el 28 de marzo de 1900. Era motorista de barcos de pesca y de ideología socialista. La noche del 28 de julio de 1936 se hallaba cenando en su casa cuando llegó un municipal avisando de que tenía que ir al “barco de las boyas”, para dar una vuelta por el río. Mi padre ni siquiera se despidió de su esposa Luz Brito Rodríguez, ni de sus hijos Luz, Juana y José —narra este último—. Ya en el barco, el alcalde le explicó lo que pasaba, el destino era Tánger. Tras atravesar la barra que daba acceso al mar, Juan Jesús sustituyó al motorista del Guadiana. A la mañana siguiente observaron a lo lejos un buque de guerra que enfilaba hacia ellos. La preocupación de los huidos era grande y los peores augurios rondaron por sus cabezas. Cuando el buque se acercó lo suficiente, se desató una explosión de júbilo al divisar la enseña republicana. Los del Guadiana empezaron a gritar y a saludar con el puño en alto. Se trataba del destructor Almirante Antequera que ayudó en lo que pudo al barco ayamontino. El grupo de huidos llegó a Tánger el 29 de julio y el planero Tofiño les condujo el 9 de agosto a Málaga para luchar a favor de la República. Juan Jesús Brito participó en la defensa de Madrid, combatió en Cataluña y en febrero de 1939 cruzó la frontera francesa en busca del exilio.

Fue internado en Argelès-sur-Mer, en la playa, vigilado por soldados senegaleses. A los pocos meses fue integrado en una Compañía de Trabajadores Extranjeros y enviado a Vacheresse, junto a la frontera suiza, para construir una carretera de montaña. Allí pasó hambre y sobre todo frío, pero aprendió a fabricar sandalias de rafia (cáñamo más fino que el esparto), que le sería luego de gran ayuda. Se fugó del campo con unos camaradas y buscó refugio en una vaqueriza a cuyo dueño los alemanes habían matado un hijo. Con ayuda de la Resistencia viajó a París, donde le proporcionaron documentación para circular por el país. Finalizada la guerra se estableció en Marsella, trabajando de artesano zapatero. Aprovechando un decreto de Franco de que podían volver los que no tuvieran las manos manchadas de sangre, regresó por tren a Huelva en el año 1948. Fueron a recibirle a la estación su esposa e hijos. Yo tenía tres meses cuando me dejó y ahora con doce años nos abrazamos por primera vez —continúa su hijo José— y al llegar a Ayamonte supo que su madre había sido enterrada el día anterior. Juan Jesús González falleció en Ayamonte el 27 de diciembre de 1982.

Fuentes: José Jesús Brito (hijo); Archivo de la Diputación Provincial de Huelva, Causa 921/1937, caja 101/1336; Registro Civil de Ayamonte, Nacimientos, Tomo 28, fol. 271.