Juan Manuel Moraño Valle

Aznalcóllar
Sevilla

Juan Manuel Moraño Valle nació el día 2 de octubre de 1918 en Almonaster la Real, provincia de Huelva. En julio de 1936, cuando estalló la Guerra Civil, vivía en Aznalcóllar, provincia de Sevilla, donde destacó junto con algunos amigos de su edad, en la defensa del Gobierno legalmente constituido. Cuando las fuerzas sublevadas al mando del General Queipo de Llano llegaron al pueblo, represaliando a todos los que habían destacado en la defensa de la República, un grupo numeroso de personas, entre las que se encontraba mi tío, tuvo que huir a la sierra, ante el peligro que corrían sus vidas. Entre los represaliados se encontraban estos seis amigos de mi tío: Rafael Alba Payán, Lorenzo Cabeza, Bartolomé Fernández Domínguez, Pedro Meniz, su hijo Antonio Meniz y Estanislao Palomo.

Mi abuelo, viendo cómo estaban matando a tanta gente del pueblo, y temiendo lo peor para su hijo de tan sólo 17 años, y afiliado al Partido Comunista de España, contactó con un pariente falangista que logró llevarse a mi tío a Sevilla y enrolarlo en las Milicias Nacionales.

Mi abuelo creía que así salvaba la vida de su hijo, pero mi tío en cuanto lo movilizaron al Frente, estando en la posición del Pozo de Arena, en Peñarroya-Pueblonuevo, Córdoba, se pasó al Ejército Republicano, llevándose con él el batallón compuesto por Francisco Mora Crespo, alias “El Cobacha”, de Écija (Sevilla); Antonio Vega Triguero, de Arahal (Sevilla); Eustaquio Asián García, alias “El Chamarín”, de Sanlúcar la Mayor (Sevilla); Manuel Ojeda Rodríguez, de Carmona (Sevilla); Antonio Carmona Amores, de La Algaba (Sevilla); Miguel Rodríguez Ríos, de San Fernando (Cádiz); Manuel Alonso Pozo, de Carmona (Sevilla); Antonio Martín Cortés, de Morón de la Frontera (Sevilla); y José López Abad, de Carmona. Estos nombres constan en la Causa nº 1.047-39, instruida contra todos ellos con fecha 3 de junio de 1937 y que se encuentra en el Archivo del Tribunal Militar Territorial Segundo de Sevilla.

Estuvo combatiendo hasta el día 27 de marzo de 1939, fecha en la fue hecho prisionero y enviado al Campo de Concentración “Zaldívar”, ubicado en Casas de Don Pedro (Badajoz), desde donde envió dos cartas a su familia, con fechas 1 y 3 de abril de 1939.

La carta que mi abuelo le envió al Campo de Concentración “Zaldívar” fechada el 20 de abril de 1939 le fue devuelta el día 27 y, desde entonces, todos los esfuerzos que realizó mi familia para saber su paradero fueron en vano. Lo que llegó a sus oídos fue que lo sacaron del campo y lo asesinaron. Nunca supieron ni dónde ni cuándo.

Según consta en dos documentos del Archivo General Militar de Ávila que obran en mi poder, con referencias “Signatura C.1501, Cp.35, F.32”, y “armario 76, legajo 1.236, carpeta 10, documento 2”, mi tío era teniente de la 109 Brigada Mixta, 434 Batallón.

Gracias a las investigaciones llevadas a cabo por Fernando Barrero Arzac, cuyo abuelo, Andrés Barrero Rodríguez, Comisario Político de la misma Compañía a la que pertenecía mi tío, y prisionero también de “Zaldívar”, y al testimonio de Felisa Casatejada, de Casas de Don Pedro, cuyos hermanos Julián y Alfonso fueron igualmente prisioneros de este campo, hemos podido saber que aproximadamente cien presos fueron sacados del mismo el día 14 de mayo de 1939 y trasladados al Olivar de las Boticarias, también en la localidad de Casas de Don Pedro, donde fueron obligados a cavar unas zanjas, y alrededor de las doce de la mañana del día 15 fueron asesinados y arrojados dentro de las mismas, sin que quedara rastro alguno de ellos. Suponemos que uno de estos asesinados era mi tío. Tenía 20 años.

En el intento de conseguir información sobre cómo fueron los últimos días de mi tío, si se le realizó un juicio sumarísimo, dónde se celebró, dónde está su condena y dónde y cómo se llevó a cabo la ejecución de la misma, me he dirigido a todos los organismos relacionados con la Guerra Civil de los que tengo constancia, y en ninguno de ellos se ha encontrado la documentación que estoy buscando.

Tengo que agradecer al investigador José Mª García Márquez el haber encontrado en los Archivos del Tribunal Militar Territorial Segundo de Sevilla la causa de sedición abierta a mi tío y sus compañeros y al historiador Francisco Espinosa Maestre por su continuo apoyo y guía durante todos estos años.