José Morón Ostos

Osuna
Sevilla
Montero Gómez, Félix J.

Obrero del campo, nacido en Osuna (Sevilla) el día 15 de diciembre de 1902, era nieto de Francisco Morón Maldonado, Antonia Herrera Martín, Juan Ostos Cea y Encarnación García Rueda; sus padres se llamaban José Morón Herrera y Encarnación Ostos García; de pelo castaño y ojos oscuros, 1,55 de estatura, estaba casado con Rosario Díaz Morales, tenía una hija de 4 años llamada Ana María y vivía en la casa número 45 de la calle Cervantes (Mancilla).

José Morón Ostos fue nombrado guardia rural el día 25 de abril de 1931 por la primera Comisión municipal gestora republicana y estuvo desempeñando el cargo hasta el día 10 de noviembre del mismo año, en que lo destituyó la segunda Comisión gestora que gobernó el Ayuntamiento de Osuna. En las elecciones de diputados a Cortes, celebradas el día 16 de febrero de 1936, actuó como interventor, designado por el candidato del Frente Popular Juan Bautista Román González, en la sección 1ª del distrito 1º, cuyo colegio electoral estuvo instalado en la sacristía de la iglesia de Santo Domingo. Y el día 11 del siguiente mes de julio volvió a ser nombrado guardia rural por el recién elegido alcalde, Manuel Morales García.

Según informes emitidos después de la guerra por Eusebio Rojas Torres y Manuel Morillo Martín, jefes de la guardia rural y de la urbana, respectivamente, José Morón Ostos no había observado mala conducta personal, pero en política estaba anotado en el partido socialista con el número 107 y era un destacado y «verdadero marxista», peligroso «por su poca cultura» e «ideales avanzados», que huyó voluntariamente al campo rojo en los primeros días del «Alzamiento Nacional».

Efectivamente, José Morón se marchó de Osuna en la penúltima semana del mes de julio de 1936, con dirección a Málaga, y permaneció durante toda la guerra en zona republicana, donde el 25 de noviembre de 1938, al ser movilizada su quinta, ingresó como soldado en la Compañía de Ametralladoras del Batallón 790 de la 197 Brigada Mixta, encuadrada en la División 71 del Ejército Popular de la República. Estuvo en el frente de Extremadura hasta enero o febrero del año siguiente, en que, tras resultar herido, fue evacuado a Albacete y aquí le cogió la terminación de la guerra. Hecho prisionero, lo recluyeron en el campo de concentración de esa ciudad. Al que, en respuesta a un telegrama remitido el 20 de mayo de 1939 por el jefe de semejante lugar, llegó dos días después un informe enviado por el alcalde de Osuna, Fernando Saborido Saborido, que decía:

José Morón Ostos, huido voluntariamente al campo rojo, era peligroso y un verdadero marxista, que figuraba anotado en el partido socialista con el número 107 y fue guardia rural con el Ayuntamiento socialista.

Trasladado desde Albacete a Sevilla, en cuya prisión provincial ingresó el día 3 de junio siguiente, desde la Auditoría de guerra se ordenó que instruyera un procedimiento sumarísimo de urgencia contra Morón Ostos al teniente provisional de infantería y juez militar número 23 de Osuna José Galán Navarro. Quien, a tales efectos, pidió informes sobre el encartado a las autoridades locales del pueblo: Fernando Saborido, el alcalde; Francisco Olid Maysounave, el jefe de la Falange; Pedro García Escobar, el teniente y jefe de la línea de la Guardia Civil, y José Calle López, el juez municipal.

Según este último, José Morón era un individuo de filiación socialista, que se marchó voluntariamente a la zona roja en los primeros días del glorioso movimiento nacional, pero del cual se ignoraba si tomó parte activa en contra del mismo. Para el teniente de la Guardia Civil, a quien el inculpado le merecía mal concepto, éste no era una persona de buenos antecedentes ni conducta, sino de extremadas ideas izquierdistas, propagandista y alentador de las masas, que estaba afiliado al partido socialista de Osuna con el número 96 y que al iniciarse el glorioso movimiento nacional se fue voluntariamente a la zona roja, aunque se desconocía si en el pueblo participó activamente en contra del Movimiento.

Olid, el jefe de la Falange, informó sobre Morón Ostos que estaba mal conceptuado en Osuna porque figuraba afiliado al partido socialista con el número 107 y desempeñó el cargo de guarda rural en un Ayuntamiento de mayoría socialista; además, en las elecciones celebradas en febrero de 1936 actuó como interventor representando al Frente Popular y al producirse el glorioso alzamiento nacional huyó de la localidad, habiendo permanecido en campo rojo hasta la terminación de la guerra. Por su parte, Saborido, el alcalde, se refirió al convecino suyo por quien le habían pedido que informara diciendo que no observó mala conducta personal, pero que en política aparecía anotado en el partido socialista con el número 107, era un destacado marxista, peligroso por su poca cultura e ideales avanzados, que fue guarda rural con el Ayuntamiento socialista y actuó como interventor en las «elecciones del Frente Popular» en 1936, huyendo después voluntariamente al campo rojo.

Al teniente Galán, que el 6 de julio de1939 lo había procesado por rebelión militar y dos días después lo interrogó en la prisión provincial de Sevilla, José Morón respondió lo siguiente:

En efecto, yo estaba afiliado al partido socialista con el nº 107 y desempeñé el cargo de guardia rural con el Ayuntamiento de mayoría socialista; en las elecciones del 16 de febrero de 1936 fui interventor, nombrado por el candidato Juan Bautista González, y el 18 de julio de ese mismo año me cogió en Osuna, de donde me marché a Málaga el día 25 siguiente, «al llegar nuestra Gloriosa Aviación». En noviembre del año 1938 fue movilizada mi quinta e ingresé como soldado en el ejército rojo, al que serví en la Compañía de Ametralladoras del Batallón 790 de la 197 Brigada Mixta y la 71 División, habiendo permanecido en el frente de Extremadura hasta enero o febrero de 1939, en que fui herido y evacuado a Albacete, donde me encontraba cuando terminó la guerra.

Una vez acabada la instrucción del procedimiento contra este vecino de Osuna, el mismo fue juzgado en Sevilla el día 30 de septiembre de 1939 por el Consejo de guerra permanente de urgencia número 1. Cuya sentencia, frente al informe del fiscal Francisco Fernández Fernández, que lo acusó del delito de auxilio a la rebelión militar con la agravante de peligrosidad social y pidió que lo condenaran a 20 años de reclusión, declaró que el procesado José Morón Ostos, socialista, de mala conducta, actuó de interventor a favor del Frente Popular en las elecciones de febrero de 1936 y al iniciarse el Movimiento huyó voluntariamente al campo rojo en donde sirvió como soldado, sin que constara probado cual haya sido su actuación antes de salir para la zona roja y durante su permanencia en la misma, por lo que no se había acreditado que cometiera acto delictivo alguno.

El hombre fue absuelto, pero no puesto en libertad, porque el tribunal, «teniendo en cuenta su conducta, antecedentes y cargo desempeñado», propuso que ingresara en un batallón de trabajadores. Y así sucedió, en efecto, pues el día 19 de noviembre siguiente fue trasladado desde la prisión provincial de Sevilla al pueblo gaditano de Almoraima para su ingreso y permanencia durante un año en el Batallón de Trabajadores número 4.

Quizás para que surtiera efecto en un expediente de depuración que el Tribunal Regional de Responsabilidades Políticas de Sevilla decidió abrirle el día 11 de marzo de 1941 sería por lo que el jefe de Orden Público de Osuna, Miguel Ángel Govantes Soto, dio unos tres meses después el siguiente informe:

Destacado individuo marxista, José Morón Ostos era muy peligroso porque, «dada su poca cultura y los ideales tan avanzados que profesaba, daba lugar a reyertas». Participó activamente en las elecciones de 1936, pues fue interventor en el distrito 1º sección 1ª y sostuvo «innumerables discusiones con los elementos de orden». Nombrado guardia rural «por el Ayuntamiento Socialista», al estallar el «Glorioso Alzamiento» se opuso tenazmente a él y «se dice» que prestó servicio con armas en la calle de la Cruz. «Al ser liberado este pueblo» huyó a la zona roja y se alistó en el ejército rojo, donde «se dice que fue nombrado Comisario de Guerra» y recibió un tiro en una pierna, a resultas del cual quedó cojo. Cuando terminó la guerra fue detenido e ingresado en un campo de concentración «de Valencia»; y en la actualidad se encuentra en Osuna, domiciliado en la calle San Cristóbal, número 72, donde vive con su mujer y cuatro hijos de 11, 9, y 4 años, y uno de 4 meses de edad.

Fuentes

  • Archivo del Tribunal Militar Territorial Segundo: PSU nº 3195/39: Legajo 9-131.
  • Archivo Municipal de Osuna: Libros 199-201, 211 y 400. Legajos 52 y 53.
  • Archivo Histórico Provincial de Sevilla: Prisión Provincial de Sevilla: legajo 21576.
  • Archivo de la Diputación Provincial de Sevilla: Legajo 575. BOP de Sevilla de 11-9-41.