Francisco Gómez Moreno

El Almendro
Huelva
Ramírez Copeiro del Villar, Jesús

Francisco Gómez Moreno, «el Cerreño», nació en El Almendro el 2 de octubre de 1909. El apodo le viene de su madre, oriunda de El Cerro. Como mucha gente de la zona, vivía del negocio de contrabando con la vecina Portugal. El golpe militar le sorprendió en la ciudad de Huelva, donde había ido a llevar café. Era de ideología socialista, así que de vuelta al pueblo se despidió de su familia y se dirigió a la sierra, donde permaneció ocho meses, viviendo del auxilio que le prestaban los contrabandistas. Ante el temor a ser detenido encaminó sus pasos hacia la mina La Isabel, cruzó la Ribera del Chanza y se internó en Portugal, el camino habitual del contrabando. En ese país vivió tres años, unas veces trabajando y otras merced al auxilio que le prestaban sus amistades. Pero fue denunciado como huido rojo y apresado por la guardia republicana en Santana de Cambas, junto con el también huido Blas Patricio Timoteo, alcalde pedáneo de Mina de Herrerías y concejal socialista de Puebla de Guzmán. Conducidos a Vila Real de Santo Antonio, fueron entregados a la policía de fronteras de Ayamonte el 15 de junio de 1940 y de allí trasladados a la Prisión Provincial de Huelva.

El consejo de guerra celebrado el 10 de octubre de 1941 condenó a Francisco Gómez Moreno a la pena de treinta años de reclusión mayor como autor de un delito de Adhesión a la Rebelión Militar, conmutada más tarde por la de veinte años de reclusión menor. Fue enviado al campo de trabajo de Chozas de la Sierra (Madrid), del cual escapó a las pocas semanas. Regresó a El Almendro, contactó con la guerrilla que operaba en la zona y formó su propia partida. Ante el acoso de la guardia civil pasó de nuevo a Portugal, siendo detenido por un guardiña del que logró escapar golpeándole y arrebatándole la pistola. Fue apresado de nuevo en Lisboa y condenado a prisión.

Pasó ocho años de destierro en el penal de Tarrafal (islas de Cabo Verde, África occidental portuguesa), junto con presos políticos lusitanos. Era un hombre joven, fuerte y aguantó. Puesto en contacto con el gobierno republicano en el exilio, a través de Curro López del Real, logró ser reclamado como exiliado político y enviado a Bélgica en 1952. Se estableció en Bruselas ayudado por el Socorro Rojo y contrajo matrimonio el 14 de febrero de 1962 con Aura, una viuda portuguesa que le había prestado auxilio cuando estuvo en prisión. Falleció en Bruselas el 17 de junio de 1983. Su hermano Juan trasladó su cuerpo y le dio sepultura en el cementerio de El Almendro, cumpliendo así sus deseos.

Fuentes: Juan Gómez Moreno (hermano) ► ADPH. Causa 2059/1940, caja 156/2047 ► Reg. Civ. El Almendro. Nacim. Tomo 10, fol. 124. ► J. Ramírez Copeiro del Villar: En tierra extraña. El exilio republicano onubense. Autoedición, 2011.