Antonio Sánchez Pérez

Cala
Huelva

Antonio Sánchez Pérez “Pincho” nació en Cala (Huelva), el 4 de mayo de 1911. Era de campo, no sabía leer, ni escribir y pertenecía al sindicato anarquista CNT. A raíz del golpe militar huyó del pueblo y buscó refugio en la sierra. En Cala dejó a su esposa Carmen López Jarana (Lebrija, Sevilla), embarazada de dos meses y a su hija Conchita. Participó en la defensa de Madrid y en febrero de 1939 pasó a Francia, siendo internado en un campo de refugiados. A los pocos meses fue asignado a una Compañía de Trabajadores Extranjeros y enviado a los Alpes franceses para trabajar en la construcción de carreteras. Y allí, en la localidad de Gap, antes de finalizar el año 1939, se alistó voluntario en la Legión Extranjera.

Una vez reclutado fue destinado al 1er Batallón, acantonado en la ciudad argelina de Sidi-Bel-Abbès, al sur de Orán, donde estaba instalado el cuartel general de la Legión. A los pocos meses fue enviado a la metrópoli y participó en la batalla de Francia para frenar la invasión alemana de 1940. Dos años después intervino en la campaña del Norte de África, consiguiendo la Medalla Colonial. En el pasador de esta condecoración figura la siguiente inscripción: Túnez 1942-1943 (medalla que le fue impuesta al final de la guerra, el 31 de octubre de 1945) .

Durante el periodo comprendido entre el 19 de septiembre de 1943 y el 25 de agosto de 1945 combatió en las Fuerzas Francesas Libres, 1er Batallón médico de la 1ª División Motorizada de Infantería, a las órdenes del general Brosset, participando en las campañas de Italia y del sur de Francia. Respecto a la conquista de Italia, Antonio Sánchez participó en los asaltos lanzados contra la línea Gustav, liberando numerosos pueblos fuertemente defendidos; luego, después de atravesar la línea Hitler, en Monte Calvo (18 mayo 1944), Monte Santia, Merie y Monte Morche (20 mayo 1944), penetró en los suburbios de Pontecorvo, todo ello al sur de Roma. Desde el 10 hasta el 13 de junio participó en los combates de Montefiascone y Bolsena, y en la toma de Radicofani y Monte Calcinajo, totalizando mil prisioneros entre ellos quince oficiales. Antonio Sánchez se ofreció voluntario para todas las misiones y las ejecutó con rapidez para multiplicar así sus acciones. En Bolsena, en la noche del 13 de junio de 1944, penetró en la ciudad detrás de los carros para recoger un herido bajo fuego enemigo; y más al norte, en Radicofani, fue él solo recogiendo heridos delante de los vehículos blindados. Por estas acciones y a propuesta del capitán médico Bernal, fue citado en la Orden de la División del 19 de julio de 1944.

Desembarcada la División en Francia, entró en contacto con el enemigo el 19 de agosto. Antonio Sánchez participó en los violentos ataques cuerpo a cuerpo de Mont Redon, en la toma de Hyères (21 de agosto 1944) y en la de Toulon, tras hacer con su unidad 3.400 prisioneros. Intervino en la liberación de Lyon (3 septiembre 1944), en la toma de Autun y atacó al enemigo sin descanso en Los Vosgos, donde se hicieron 500 prisioneros. La División se distinguió de nuevo en Giromagny, Ballon de Alsacia, Sewen y Grosmagny, consiguiendo una brillante victoria que la llevó a Alsacia. Por su valerosa actuación en estas campañas Antonio Sánchez fue citado en la Orden del Ejército del 27 de enero de 1945 y el general Charles De Gaulle, presidente del gobierno provisional de la República francesa y jefe del ejército, le concedió la Cruz de Guerra con Palma.

Acabó la guerra con el grado de soldado de 1ª Clase. Fue desmovilizado el 25 de agosto de 1945 en la localidad de Fontenay-Tresigny, al este de París, con derecho a unas vacaciones de licencia de setenta y ocho días. Por último, el 5 de mayo de 1947 le otorgaron la Medalla de la Resistencia Francesa por su valerosa actuación en la batalla de Francia; y el 18 de diciembre, la Medalla Conmemorativa de los Servicios Voluntarios en la Francia Libre.

Finalizada la guerra mundial se colocó de vaquero, en una explotación ganadera, en Richebourg. Allí estuvo desde julio de 1946 a noviembre de 1948. Luego se trasladó a Melun, al sur de París y trabajó en una fábrica de radiadores hasta su jubilación. Durante muchos años nada supimos de él –confiesa su hija Antonia– Mi madre viajó a Francia en marzo de 1957 para reunirse con él. Las dos hijas no fueron, por tener novio y a punto de casarse. Yo conocí a mi padre con 33 años –continúa Antonia– la primera vez que pudo ir a Cala de visita. Fue en el año 1970 y a partir de entonces volvió todos los veranos. Luego compró una casita en el pueblo, que es ésta, donde yo vivo. Regresó definitivamente a Cala y falleció el 4 de octubre de 1988, a los seis meses de su llegada.

Fuentes

Documentación de Antonia Sánchez López (hija); Reg. Civ. Cala. Nacim. Tomo 24, fol. 73.

J. RAMÍREZ COPEIRO DEL VILLAR: En tierra extraña: El exilio republicano Onubense. Autoedición, 2011.