Nació el 24 de junio de 1910, hijo de Urbano Reinoso y Dolores Monge. Se casó con Dolores Carretero Luque y no tuvieron niños.
Todos aquellos vecinos a los que hemos entrevistado coinciden en que era un hombre muy valiente y temperamental, incluso en el momento de su muerte.
Después del 24 de julio de 1936, cuando Castillleja del Campo fue tomado por militares sublevados y un grupo de falangistas de la zona, Alfredo igual que la mayoría del pueblo fue detenido y encarcelado, no sabemos si en la cárcel del ayuntamiento o en los colegios. La cárcel era muy pequeña, por eso habilitaron los colegios, para encerrar a los hombres en la clase de los niños y a las mujeres en la de las niñas.
Después fue trasladado a la cárcel de Sanlúcar la Mayor, de donde fue sacado el día 10 de Agosto de 1936 para ser asesinado seguramente en la Venta del Repudio, suponiendo que su cuerpo fue enterrado en una de las fosas comunes del cementerio de Espartinas, junto a su compañero y vecino Cándido Nieves Perea, que fue ejecutado el mismo día. Relatan que su muerte, según contaban los falangistas y guardias civiles de la localidad que lo presenciaron, fue más violenta que la del resto de hombres, porque se resistía y alzaba el puño y daba vivas a la República cuando esperaba que dispararan contra él.
En el informe que la comandancia de la Guardia Civil de Carrión de los Céspedes redactó indicando la causa de que le fuese aplicado el Bando de Guerra (documento del archivo del Juzgado de Paz de Castilleja del Campo), se le señala como “promotor de manifestación contra falangista muerto”.
